miércoles, 7 de abril de 2010

Huya conmigo a un séptimo cielo indescubrible



Quiero expresar un deseo
del reflejo que nace de mis entrañas
dolidas y estremecidas
por un sentimiento que aun arde sin flaqueo.


Quiero cavar más profundo el refugio tibio
que por tanto tiempo suplió convencido
del maná exquisito y dulce de su pecho estremecido
que desbordaba protagónico cómo sus corrientes de río.


Quiero desbordarme en llanto lamentable
exprimir cada gota de líquido vital
que me mantiene vivo, altivo y perdurable
para así drenarle a mi pecho la intolerable amargura capital.


Quiero vestirme de blanco angelical
por un pecho con mis alas volar
y aterrizar seguro y certero en un vendaval
de razones para no olvidar…


Quiero vivir en lugares lejanos dónde estés,
platicar a tu subconsciente cuando duermes
para pedir en tu sueño ceremonioso
el lugar en tu ser que cómo molde calza genioso.


Quiero prestar un verso a la luna quimera
para iluminar las noches venideras
que aunque lejos me quieras
cerca esté cada noche – a tu diestra…


No quiero culminar jamás este verso
que quizá se pierda en el firmamento
más quiero cultivarlo en tu alma siempre inquieto
por si muero… que prevalezca en ti grandioso…

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