miércoles, 14 de abril de 2010

Dolor de Otoño



Con vientos cautelosos de esta noche fugaz
de un octubre sin reposos que termina sagaz;
quiero volar en los cielos de aviones de papel
donde una lágrima se despide de un destino cruel.

La visibilidad de mi palco es casi nula;
mis ojos tristes destilan una voz que angula
en los rincones de un firmamento que lejos
hace la señal final sin complejos.

Las alas de mi avión son hojas caídas
de este otoño que se desliza en urgidas
semblanzas que retoñan fingidas
en mi surco abierto de añoranzas restringidas.

Bajo la luna de una cosecha en oriente
recojo el fruto de la semilla viviente;
que engendrada hace ferviente
el elixir de mi ser desembocado en ti eminente.

Dejaré correr mis entrañas en el fondo
de tus pupilas dilatadas de un hondo
suspiro que en remembranza profundo
deja libre mi esencia en tu pecho fecundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario